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06
Dic

Salas de espera en hospitales: mejorando la calidad de vida de los pacientes

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Las salas de espera de un hospital de oncología son lugares muy especiales. Y es que, durante el proceso de tratamiento contra la enfermedad, que puede ser muy largo, estos espacios se convierten en el entorno rutinario de los pacientes. Pacientes que, habitualmente, se enfrentan a largas esperas y a momentos de elevada carga emocional y estrés.

Por eso hoy os queremos compartir un interesante vídeo donde explicamos el proyecto de transformación de una sala de espera de un hospital oncológico que hemos realizado recientemente.

Un proyecto maravilloso que nos ha enseñado muchas cosas sobre la humanización hospitalaria. En el vídeo podréis ver nuestra metodología y cómo afrontamos este tipo de proyectos, aunque si queréis conocerlo todo sobre cómo ha sido el proyecto, os recomendamos seguir leyendo más abajo.

Historia y concepto clásico de las salas de espera en los hospitales

En los últimos tiempos se están haciendo esfuerzos para mejorar la atención al paciente y las puntuaciones de satisfacción del paciente. Es más, la atención centrada en el paciente está cada vez más de moda. Sin embargo, las encuestas siguen mostrando que las salas de espera son un factor decisivo en la satisfacción del paciente.

Es un hecho que las salas de espera han sido hasta hace pocos años un concepto estancado que no ha evolucionado mucho desde sus inicios. Las principales mejoras han venido de la mano de la tecnología, con pantallas informativas. Por lo demás, los principales cambios han sido meramente estéticos, cambiando el mobiliario, la iluminación o algunos aspectos de la decoración; sin pararse a realizar otro tipo de cambios que deriven en una mayor humanización de la experiencia.

Y es que lo único cierto es que miles de pacientes con cáncer se pasan horas en las salas de espera todos los días. La estética es importante, pero en Simbiotia creemos que es el momento de reflexionar profundamente y reexaminar el propósito de las salas de espera. ¿Cuál es su funcionalidad? ¿Cómo podríamos hacer de ellas lugares lo más agradables posibles para los pacientes?

¿Por qué son tan importantes las salas de espera oncológicas? 

La sala de espera suele ser el primer contacto que el paciente tiene con los servicios de oncología médica y oncología radioterápica. Es aquí donde debe comenzar cualquier estrategia de apoyo, tanto de índole psicológico como emocional.

Aunque la mayoría de personas puedan pensar que una sala de espera es un lugar sin especial importancia, lo cierto es que es un espacio que puede cambiar radicalmente la vida de las personas. No obstante, en ella pasaremos algunos de los momentos más angustiosos y estresantes de nuestra vida.

A continuación, os dejamos con algunos datos de relevancia sobre estos espacios, que nos permiten hacernos una buena idea de su importancia.

  • Los pacientes suelen pasar un tiempo medio de 8 semanas en las salas de espera de oncología
  • Diversos estudios señalan que el tiempo medio de consulta es de poco más de 9 minutos. Sin embargo, el tiempo de espera puede llegar a las 5 o 6 horas. 
  • Casi la totalidad de los pacientes coinciden en lo interminables que resultan los tiempos de espera, algo que influye de forma muy negativa en sus estados de ánimo.

Sin duda, las salas de espera de oncología representan un entorno delicado que requiere un replanteamiento en la forma de entender el espacio, así como una nueva metodología para atender a los pacientes.

Nuestra metodología para el diseño de salas de espera

En Simbiotia creemos que la investigación en este tipo de proyectos es una fase clave que asegura crear proyectos que tengan un verdadero impacto. Por este motivo, dedicamos prácticamente el 80% del tiempo a realizar profundas investigaciones, reservando el 20% restante para el diseño del proyecto.

Con el objetivo de entender bien las necesidades que tienen los usuarios de estos espacios sanitarios abordamos la investigación en dos partes bien diferenciadas.

En primer lugar, acudimos a las fuentes primarias. Realizamos entrevistas a los diferentes profesionales sanitarios (médicos, personal de enfermería, administración, etc.), además de a usuarios que han vivido el proceso en primera persona. Para profundizar aún más también recurrimos a conocer la experiencia de los familiares y acompañantes de los pacientes. ¿El objetivo? Recopilar todas las visiones y experiencias posibles para tener la máxima información.

En segundo lugar, nos valemos de fuentes externas como estudios científicos e investigaciones internacionales ya publicadas sobre el ámbito, lo que nos ofrece una visión más global. 

Y como los ejemplos son los mejores aliados para explicar conceptos, te dejamos el siguiente vídeo donde hicimos un proceso de transformación muy disruptivo del área de oncología enfocado a la humanización de la atención sanitaria en un hospital.  Y en todo el proceso, basamos esta metodología de design thinking y nos permitió llegar a conclusiones muy profundas y a resultados, que como podréis ver en el vídeo, no se han visto previamente en ningún proyecto similar.

 

Resultados de las investigaciones

Como resultado de nuestras investigaciones y entrevistas, hemos llegado a la conclusión de que existen 5 principales áreas que engloban las claves de la problemática en el diseño de salas de espera oncológicas.

Información

Hemos descubierto que la falta de información orientativa sobre los tiempos de espera es el principal generador de estrés para los pacientes. En este sentido, destacamos las palabras del director del Health Environments Steelcase Health, que afirma que la información puede ser el mejor antídoto para la ansiedad en las salas de espera.

En nuestras investigaciones nos hemos encontrado con algunos ejemplos sobre ello. Por ejemplo, el más ilustrativo, el de una paciente comentaba que no se atrevía a ir a comer, ya que temía no escuchar la llamada, quedándose así hasta 6 o 7 horas sin comer.

Asimismo, otros pacientes manifestaron que la posibilidad de perder información sobre su turno les generaba ansiedad. Por último, algunos sugirieron que la presencia de un panel informatizado con el orden de entrada de los pacientes y el tiempo de espera les haría estar menos estresados.

Relación con el entorno

En las investigaciones también hemos observado que la interacción de los pacientes con las demás personas, ya sean pacientes o acompañantes, es una de los factores que más afectan al estado de ánimo.

Algunos de los problemas a los que se enfrentan los usuarios de las salas de espera oncológicas son el elevado tono de las conversaciones de acompañantes o los diálogos de otros pacientes, que pueden hablar de la enfermedad o de diferentes experiencias que no pueden ser del agrado de todos y afectar al estado de ánimo.

Asimismo, hemos constatado que la falta de privacidad es un problema, como demuestran diversos estudios como los de SteelCase Health y el realizado por Herman Miller. En este último se comprobó que los dos asientos más aislados de la sala de espera eran los más utilizados. – Herman Miller, Parkland hospital pharmacy waiting room observations.

Mobiliario

Hace ya muchos años que entre los profesionales de la humanización sanitaria existe un consenso sobre lo inadecuado del mobiliario de la mayoría de salas de espera de los hospitales. Nos referimos a esas sillas rectas e incómodas, dirigidas hacia una anodina pantalla.

Es por ello que hemos realizado diversas investigaciones sobre las que hemos sacado conclusiones impactantes.

Entre las principales problemáticas nos encontramos con la falta de espacios para objetos personales y dispositivos tecnológicos. A este respecto, un estudio de SteelCase Research señala que el 80% de las sillas no están ocupadas por pacientes o acompañantes, sino por objetos personales.

Asimismo, los usuarios de las salas de espera de hospitales reclaman más variedad de asientos y que estos sean más cómodos. Y es que estos asientos suelen ser todos iguales y no son inclusivos, pues no tienen en cuenta la edad o el peso de la persona. Tampoco son estéticos, algo que según un estudio de “The ecology of the patient visit: Physicall attractiveness, waiting time and perceived quality of care” puede aumentar la ansiedad de los pacientes.

diseño de salas de espera hospitales mobiliario

En cuanto a la estética resulta interesante la utilización del diseño biofílico como catalizador del estrés de los pacientes. Según el estudio de Healing Spaces; Elements of environmental design that make and impact on Health, Scheweitzer, Gilpin, el uso de madera y colores naturales también ayuda a reducir el estrés.

Actividades

Está demostrado que las largas estancias en las salas de espera de oncología, junto con el estrés asociado a la espera de resultados, generan una gran ansiedad en los pacientes. Esta ansiedad podría ser minimizada utilizando distracciones positivas que hagan que el paciente se relaje, desconecte y no tenga pensamientos negativos.

Algunos pacientes también manifestaron que tener acceso a material de lectura de calidad durante la espera, como prensa diaria, magacines o libros sería una buena distracción para hacer más llevadero el tiempo en las salas de espera.

Asimismo, hay otras actividades que se ha demostrado sobradamente que funcionan como una distracción positiva que reduce el estrés de los usuarios. Así lo demuestra un estudio realizado por la California HealthCare Foundation. Improving the patient experience: Best practices for safety-net clinic design. 2009, que demuestra que los dispositivos móviles, el material educativo, el disponer de buenas vistas exteriores o el acceso a programación de TV con películas, supone una actividad que reduce la ansiedad de los pacientes.

Estimulación Sensorial

En Simbiotia estamos especializados en la estimulación sensorial para el tratamiento de enfermedades como el alzheimer. Pero esta herramienta también se puede utilizar para mejorar la calidad de vida de los pacientes en las salas de espera oncológicas.

A través de la estimulación sensorial es posible bajar el nivel de ansiedad de los pacientes. Cosas tan simples como adecuar la temperatura, la iluminación, poner música suave y agradable o la utilización de colores vitamínicos revierte en claros beneficios para los usuarios, como ha demostrado el estudio  – Lindberg and Homes, Medical Practice top improvers – A client resource of innovation and best practices.

Durante la investigación también pudimos escuchar de palabras de los pacientes como los colores pueden afectar al estado de ánimo. Uno de ellos manifestó que le gustaría una sala de espera más alegre, menos oscura y triste. Otro afirmaba que la enfermedad ya afectaba suficientemente a la psique, por lo que agradecería tener una sala con colores más agradables y alegres.

Otros estudios realizados sobre la estimulación sensorial han arrojado resultados relevantes. Por ejemplo, el estudio The Greening of an oncology Clinic Waiting Room, de Sarah Blashke, demuestra que el 81% de los usuarios afirmaron que la presencia de plantas afectó de forma positiva a su ánimo. El 62% prefieren plantas naturales y un 76% están de acuerdo en que mejor prefieren plantas de plástico que ninguna planta.

Conclusiones sobre el diseño de las salas de espera oncológicas

Cómo bien has visto, la problemática de las salas de espera en los hospitales reside en algo más profundo que en la simple estética y en aprovechar las bondades de la tecnología. Quizás vaya siendo hora de rediseñar las salas de espera y crear espacios de participación de los pacientes donde estos se sientan verdaderamente a gusto.

Si quieres seguir aprendiendo más sobre cómo la humanización hospitalaria y el diseño biofílico pueden cambiar el concepto de las salas de espera en los hospitales, te recomendamos echar un vistazo a nuestra página sobre Entornos Terapéuticos Asistenciales y al apartado de Planes de Humanización donde te mostramos cómo trabaja nuestro equipo de terapeutas y diseñadores en la creación de espacios asistenciales centrados en las personas y, por supuesto, para las personas.


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